102. Marzo - 2008

CONCURSO CII  MARZO - 2008

JURADO: MARISOL NAVA HERNÁNDEZ

TEMA: PERSONAJES DE LA MITOLOGÍA GRIEGA

Mitología griega

PRIMER LUGAR

CENTOLLO

El reposo del guerrero

 —¿De una década que tardaste en volver de Troya, siete años los pasaste con una ninfa? –La reina fue levantando la voz— ¿Y te quedas tan tranquilo?

Odiseo, cabizbajo, se mantuvo en silencio. Sería peor contar la verdad: que en Ogigia estuvo solo, a gusto por fin, alejado de esposa y amantes, amigos y enemigos.

SEGUNDO LUGAR

TU TAN JAMON

Mientras Atenea duerme

Cancerbero seduce a Circe, que termina convirtiéndolo en un Adonis. Ariadna no recuerda qué debe hacer con el ovillo, se pone a tejer una capa que cubrirá al mendigo que por allí pasa portando arco y flecha, flecha que disparada por casualidad acaba con la vida de un tal Zeus que deambula sin su égida. En los aposentos de Penélope dejan una misteriosa caja en la cual la personificación de la paciencia jamás reparará ocupada en otros menesteres, los calores que provoca en ella un caballero de nombre Apolo. Orfeo, harto de la melodía tapa sus oídos con cera, se deshace con brusquedad del instrumento que toma Eurídice y hace sonar; Hades, embelesado se quita el casco para besarla perdiendo así su invisibilidad y el reino de las sombras, convertido en hogar de flores, corazoncitos y mariposas, cierra por falta de trabajo. Caronte, ahora desocupado, se dedica a vagar por los mares llegando a Esparta, donde se enamora hasta la perdición de una belleza llamada Helena, amor que, correspondido, los lleva a escapar a la isla de Creta, donde, como niños, pasan horas divirtiéndose en un laberinto...

Ninguno supuso que aquella inocente celebración a la cual fueron invitados por Dionisos, terminaría desencadenando una hecatombe beoda tan Olímpica que daría vuelta la historia.

TERCER LUGAR

LA AUSENTE - Lucía Casas Rey

Reciclaje

Cuando Ulises llega a Itaca, Penélope decide realizar en sus aposentos una limpieza profunda: desprende los sueños suspendidos de las arañas; barre el deseo hacinado bajo la cama; de las paredes despega la ira, la soledad y el desaliento; descuelga del ropero la ternura apolillada, e introduce todo en una caja y la envía al rey del Olimpo a quien siempre consideró culpable de su propia odisea. El empleo que Zeus le dio ya se conoce. ¡Pobre Pandora!

MANLYF

Advertencia

El hombre creó a Dios a su imagen y semejanza. Creó varón y hembra y les dijo: sed prolíferos y multiplicaos. Y les dio un monte lleno de riquezas para habitar con una condición: no comer del árbol del bien y del mal. Pero comieron de la fruta prohibida por lo que se les condenó a vivir lejos del Olimpo, entre museos y textos literarios por los siglos de los siglos.

MENCIONES:

HORUS

Génesis

El discurso de Zeus al inaugurar la era Andrógina fue sublime: nada de vivir separados del ser amado, ahora serán literalmente uno mismo. Y si bien hemos tenido algunos problemas menores como la sincronía de cuatro piernas y cuatro brazos, lo que me tiene más molesto es el asunto de la reproducción. Zeus nos prometió que podríamos tener sexo cuantas veces quisiéramos, ya que en un mismo ser habría un órgano masculino y uno femenino. Solo que alguien cometió un estúpido error de diseño, porque mi órgano sexual apunta para un lado, y el de mi compañera para el otro. Físicamente, jamás podremos copular. Esto es inadmisible. Seguramente estos dioses que nos han tocado son una punta de principiantes. He escuchado que es tal el descontento, que a Zeus no le ha quedado más remedio que dividir a los andróginos con sus rayos. Menos mal. Espero con ansias mi turno.

NUBE

Travesuras divinas

Observa que el satélite está en fase creciente y espera ansioso. Trata de resistir cuando la luna llena florece, henchida, en las alturas, pero la tentación es demasiado fuerte; lanza sus flechas hacia ella y dispara una y otra vez hasta lograr desprender un trozo que saborea con deleite. Luego, contrito, contempla al astro cercenado; con esa mengua, resulta muy deslucido en el firmamento.

Zeus, furioso, ha de rehacerlo. En las alturas, aparece la luna nueva, recién formada, flamante.

Selene está realmente colérica; Eros es malcriado y consentido, pero es sólo un chiquillo. Decididamente, tendrá que volver a hablar con Afrodita.